Este último tramo del proceso electoral, se ha iniciado con una batalla mediática en torno a un partido extremista como manzana de la discordia, escenario que nos permite sacar algunas conclusiones.
Es alarmante que los comunistas reunidos en Patria Roja y el Movimiento Nueva Izquierda (que cuentan con una maquinaria partidaria montada detrás de los llamados "comités de defensa" a nivel nacional), con casi nulas posibilidades electorales por la naturaleza subversiva de sus planteamientos -traducida en hechos virulentos que desencadenaron graves conflictos sociales en el país- vayan a obtener réditos políticos, gracias al apetito electoral de quién los convirtió en sus socios.
La denominada "izquierda democrática", "progresista" o "caviar", que se ha esforzado en la última década por tomar distancia del socialismo marxista, ha hecho trizas la supuesta metamorfosis. En pocos días pulverizó sus anteriores argumentos y deslindes ideológicos, para adoptar tibias posiciones respecto a los radicales violentistas, justificando lo injustificable, en su afán por alinearse con Villarán.
El silencio previo de Flores Nano, -cuando Kouri estaba todavía en el “candelero”- frente a la presencia de estos comunistas como candidatos, no sólo en Lima, sino, principalmente, en diferentes distritos y provincias del interior del país, no se puede atribuir a la desinformación. Probablemente obedeció a una mera estrategia electoral, con la finalidad de captar el voto de la izquierda indecisa por la ausencia del humalismo en estas elecciones.
Todo parece indicar que seguimos observando la viciosa práctica política de claudicación de convicciones para subordinarse al cálculo electoral. ¡¡Votos a cualquier precio!!
Es alarmante que los comunistas reunidos en Patria Roja y el Movimiento Nueva Izquierda (que cuentan con una maquinaria partidaria montada detrás de los llamados "comités de defensa" a nivel nacional), con casi nulas posibilidades electorales por la naturaleza subversiva de sus planteamientos -traducida en hechos virulentos que desencadenaron graves conflictos sociales en el país- vayan a obtener réditos políticos, gracias al apetito electoral de quién los convirtió en sus socios.
La denominada "izquierda democrática", "progresista" o "caviar", que se ha esforzado en la última década por tomar distancia del socialismo marxista, ha hecho trizas la supuesta metamorfosis. En pocos días pulverizó sus anteriores argumentos y deslindes ideológicos, para adoptar tibias posiciones respecto a los radicales violentistas, justificando lo injustificable, en su afán por alinearse con Villarán.
El silencio previo de Flores Nano, -cuando Kouri estaba todavía en el “candelero”- frente a la presencia de estos comunistas como candidatos, no sólo en Lima, sino, principalmente, en diferentes distritos y provincias del interior del país, no se puede atribuir a la desinformación. Probablemente obedeció a una mera estrategia electoral, con la finalidad de captar el voto de la izquierda indecisa por la ausencia del humalismo en estas elecciones.
Todo parece indicar que seguimos observando la viciosa práctica política de claudicación de convicciones para subordinarse al cálculo electoral. ¡¡Votos a cualquier precio!!
Es increible que los columnistas de varios diarios se dediquen a tomar partido por una u otra candidata en lugar de analizar lo que este post puntualiza. No solo políticos, sino periodistas apañan este tipo de conducta inescrupulosa para ganar votos.
ResponderEliminarA ciertos políticos les sobra "astucia" electorera...
ResponderEliminarNo tienen verguenza en decir un día una cosa, y, después, justamente afirmar o hacer lo contrario. Ni les cuesta nada ser "sinuosos" o "ambiguos" si con eso piensan que tendran mayor electorado. Pero esto tiene un nombre: MANIPULACION de los ciudadanos...!!
Piensan, hablan, actuan por conveniencias (no por convicciones) del momento. Contradictoriamente su unica "conviccion" es ser oportunistas hasta lograr el poder... Esta es una practica politica que como dice el articulo es viciosa, es negativa y se debe denunciar como ejemplo nocivo para los que aspiran a ser políticos honestos.
Pienso que las elecciones municipales deberían ser mucho menos politizadas que las generales, pues el cargo de alcalde es más vecinal que político.
ResponderEliminarPero ya que se dió el caso, el 3 de Octubre nos tocará evitar que la izquierda administre nuestra capital, para estos personajes lo único importante es el poder y no harán nada bueno por Lima, estarán pensando solamente en usar la alcaldía como trampolín para 2016. Y además porque sus planteamientos son malos, peligrosos o ridículos.
Lo que ofrecen el PPC y otros partidos técnicamente es muy superior a lo de los comunistas, pero a uno le deja mal sabor que la politiqueria y el cálculo interesado estén ahi. Necesitamos que la ética sea parte fundamental de la política.
A mi me parece lamentable que otra vez estemos buscando elegir al candidato menos malo y no por personas idoneas y programas de accion
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