Hacer lobby o gestionar con maña intereses particulares de un grupo, para influir en decisiones claves, es una nefasta práctica que no se limita a gobiernos nacionales, sino por desgracia, principalmente ronda a organismos internacionales como la ONU.
Con la anuencia y el financiamiento de Directora del Fondo de Población de las Naciones Unidas, Thoraya Obaid (polémica promotora del aborto legal irrestricto), un grupo de jóvenes de ideas radicales pretende imponerse en la conclusiones de la Conferencia Mundial de la Juventud 2010, sobre las prioridades en la agenda de desarrollo para la juventud mundial, que debe incluirse en el documento de los gobiernos que será presentado ante la ONU este fin de mes. Si esto sucede, las opiniones de estos jóvenes dirigidos por el UNFPA serán consideradas "voz de autoridad" por algunas naciones.
Piden por ejemplo, que los jóvenes (entre los 15 y 23 años) tengan entre otros "derechos sexuales, reproductivos... libertad de expresión e identidad de género, sexo, de identidad sexual u orientación sexual", piden que se les reconozca derechos a salud sexual y reproductiva confidencial en "contextos formales y no formales", y derecho al aborto. Piden garantizar protección contra la interferencia arbitraria de la privacidad. Asegurar que ningún tercero (léase sus propios padres) tenga acceso a datos privados de importancia para su poseedor sin el consentimiento directo y continuo.
En dicho documento también exigen que los gobiernos y la sociedad civil, -como sino no fueran parte de ella- erradiquen la criminalización contra jóvenes y declaran que "deben respetar el imperio del derecho para asegurar que no estén abusando de su poder", en contra de jóvenes "defensores de Derechos Humanos y los activistas políticos y sociales".
Todo el documento esta profundamente ideologizado y no representa ni por asomo a toda la población mundial de jóvenes que se calcula en mil millones.
En respuesta a toda esta orquestada manipulación, la Alianza Internacional de la Juventud lanzó, hace unos días, su Declaración de la Juventud a la ONU y al Mundo. El manifiesto, que consta de ocho principios fundamentales, tiene por objeto demostrar a la ONU y al mundo que la juventud radical no habla en nombre de la mayoría de los jóvenes.
Ésta gira en torno a ocho principios, entre los que se encuentran los siguientes: «Los jóvenes son seres relacionales formados en la familia», «Los padres son los principales educadores de los jóvenes», «Los derechos de los jóvenes están basados en sus capacidades en desarrollo», «Debe respetarse una interpretación adecuada de la sexualidad y de las relaciones saludables», «Hombre y mujer están fundados en la naturaleza».Sustentan su posición en documentos claves como el principio de la Declaración Mundial de los Derechos Humanos, según el cual "la familia es la unidad fundamental y natural de la sociedad" y tiene derecho a ser protegida de manera especial por el Estado.
Esta declaración además, equilibra los derechos de la juventud con sus padres, basándose en sus capacidades en desarrollo, según lo establece la Convención sobre los Derechos del Niño. Asimismo, evoca el único acuerdo internacional vinculante en lo que respecta a la definición de género: el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, el cual afirma que "género" se refiere a los dos sexos, masculino y femenino.
Es necesario que gane la sensatez.
Deja mucho que desear la ONU, cada vez más se mete a apoyar causas nefastas.
ResponderEliminarCon solo ver el afiche "Saludable, feliz y caliente" auspiciado por el Fondo de Población de la ONU, es fácil deducir que estos chicos están siendo manipulados. Estos jóvenes están extraviados. Apoyemos la propuesta de los chicos responsables¡¡¡¡
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