24 ago 2009

PERÚ 2011: LOS POLITICOS ACTUALES NO GENERAN CONFIANZA




La última encuesta, realizada en la capital por el Grupo de Opinión de la Universidad de Lima, admite otra lectura a las usuales: la pobre o casi nula confianza que tienen los ciudadanos en los antiguos políticos que están en vitrina para las elecciones nacionales del 2011.
Luis Castañeda 20.2 %
Keiko Fujimori 16.1
Lourdes Flores 12.9
Alejandro Toledo 9.5
Alex Kouri 6.3
Pedro P. Kuczynski 5.9
Ollanta Humala 3.8
Yehude Simon 2.8
Jorge del Castillo 2.5

Este es el resultado de la evaluación que hace el ciudadano del comportamiento cotidiano de estos políticos.

En sicología social, la confianza es la percepción que se tiene respecto a la capacidad y conducta ética de una persona y sobre la eficiencia de ésta en temas que atañen a los demás. La confianza se refuerza en función de sus acciones.

"La confianza es una hipótesis sobre la conducta futura del otro. Es una especie de apuesta que consiste en no inquietarse del no-control del otro y del tiempo."(Laurence Comu).

A la luz de estos resultados, todo parece indicar que esas personas son papel borroneado en niveles de confiabilidad. La regeneración en y del sector político es indispensable si es que no queremos votar otra vez por "el mal menor".

En esta misma encuesta se distingue la diferencia entre aprobación y confiabilidad.

Castañeda Lossio obtiene una aprobación a su gestión en de 79.5, que, correlacionada con la anterior, más o menos puede indicar que la gente le avisa "me parece bueno tu trabajo, pero no confió en tí".

Por otro lado, los políticos aparecen como totalmente desconectados de la población.

Mientras Alan García y Ollanta Humala no consideran a Sendero Luminoso como una amenaza para el país, el 86.3% de limeños y chalacos percibe a Sendero como un grave riesgo. El primero puede que minimice la presencia senderista por su ineficiencia para combatirlos en el VRAE, pero el extravío de Humala es simplemente injustificable.

Tampoco le fue muy bien a Lourdes Flores con su propuesta de conformar una alianza de “centro”, porque el 61.9 de los encuestados prefiere que cada partido se presente solo. La mayoría de los ciudadanos percibe que esos frentes electorales, construidos sobre intereses efímeros, y no en ideas o proyectos políticos maduros, duran lo que dura la campaña electoral.

Desconfianza y desconexión que a la larga pueden acarrear serias distorsiones sobre la percepción de la ciudadanía respecto a los verdaderos fundamentos y beneficios de vivir en un sistema democrático.

1 ago 2009

PERU Y BIEN COMÚN


Reflexiones de Fiestas Patrias



La homilía del Cardenal Juan Luis Cipriani por fiestas patrias ha sido particularmente importante este año, porque abordó temas de vital importancia, que no sólo son válidos para estas fechas, sino un derrotero para construir una nación fraterna y justa. ACCIÓN POR EL BIEN COMÚN transcribe algunas de sus partes en razón de su singular valor orientador para toda actividad pública y política en nuestro querido país.



  • Hay que peruanizar el Perú, esa estima, ese amor a nuestra patria, acentuar la unidad lograda, asentar sobre bases de justicia, la convivencia, exaltando los factores que nos congregan Debemos asombrarnos con optimismo de la unidad.
  • Alertas, que con la Patria no se juega. No sólo están en riesgo la democracia y el estado de derecho, sino algo mucho más profundo, que constituye el elemento esencial de nuestro ser peruanos: la libertad, la dignidad, la honra, el desarrollo real de los pueblos, la lucha contra la pobreza, la memoria de nuestros antepasados, principios irrenunciables. En estos casos, la Patria reclama de todos unidad inquebrantable frente a los intentos de intromisión extranjera en los asuntos internos.
  • “La democracia es un sistema cuya realización genuina debe compaginar la igualdad con el pluralismo. Y es precisamente en esta difícil articulación donde se juega en buena medida la categoría ética de la democracia y, a la postre, la pervivencia de la democracia misma”. (Alejandro Llano, Ética y Democracia, 1989).
  • La base natural de una sociedad es la confianza entre sus miembros. La única manera de que crezca la confianza es promoviendo una conducta ética, dirigida por el bien común, que supera el egoísmo de buscar, antes que nada, los propios intereses particulares.
  • Si en la economía de mercado no se incorpora de manera seria y normada la dimensión de la ética, no hay tal economía ni tal mercado. Queda un abuso del más fuerte sobre el más débil. La llamada “mano invisible” no lo arregla todo. La economía es de índole social. Por eso, la economía tiene, hoy en el mundo, la gran oportunidad de recobrar su rostro profundamente humano.
  • “Lograr la auténtica unidad (Benedicto XVI, Encíclica Caritas in Veritate) es tan importante que exige tomarla en consideración para comprenderla a fondo; y movilizarse concretamente con el «corazón», con la fibra, con la ilusión, con el optimismo, con la firmeza, con el amor a la patria, a fin de hacer cambiar los procesos económicos y sociales actuales hacia metas plenamente humanas”.